COSAS DE ASTROLOGIA
Cuando la vaca, la cabra,
las ovejas del pirineo o cornudas están por dar leche, dicen que
suelen darla hasta por los cuernos, que sepa, yo no me encuentro en
esa situación, porque no soy vaca, cabra, oveja del pirineo o algo
por el estílo, ya que no acostumbro a andar a cuatro patas sino a
dos, no me alimento de pastos, aunque si de esos animales que los
comen y de sus productos derivados y otros.
Según mi horóscopo o
esos astros que rigen el universo, me encuentro englobado dentro del
grupo de los capricornios, por tanto me correspondería ser un macho
cabrío, quiero decir que si alguien trata de ordeñarme, la única
leche que podría dar, es la que me salga de los cojones, si el que
trata de hacerlo o la que trate de lo mismo consigue ponerme cachondo
y hacer que me corra.
Que yo sepa y a pesar de
mis cortos conocimientos en el mundo de la astrología o del
universo, somos el signo más importante, ya que cíclicamente somos
los que despedimos un año y comenzamos otro nuevo, cosa que ninguno
de los otros signos son capaz de hacer.
También alumbramos o
lucimos más que ninguno de los otros, porque es cuando las noches
son más largas y cuando mejor se nos ve, ya que disponéis de más
horas de oscuridad para poder contemplarnos, solo tenéís que mirar
hacia nuestra constelación para poder contemplarnos.
Las noches que hay
escarcha o se produce ese hielo que a muchos os hace tiritar de frio,
porque el firmamento se encuentra despejado como nuestra mente cuando
se ofrece en esas mismas circunstancias, es cuando mejor nos podéis
observar.
Somos un signo de aire,
agua y tierra, porque estamos todo el día en el campo donde nos
suele dar el aire, el agua cuando llueve y la tierra porque nos
alimentamos de lo que esta produce o nos ofrece.
Cuando el dios Eolo o de
los vientos sopla y no queremos hacerle frente, le damos el culo,
para que nos entre por éste y nos salga por la boca, somos así de
maricones, que le vamos a hacer.
Cuando es la diosa de la
lluvia o de teotihuacan quien nos moja, hacemos lo mismo darle la
espalda o enseñarle nuestro culo.
Y el día que la tierra
no nos quiera dar lo que nos tiene que dar para nuestro sustento,
pues le dirémos: a tomar por culo y ahí acabará nuestra historia.
No soy el más indicado
para decir que esto sea así, porque no soy astrólogo, tampoco me
dedico a estudiar el universo, aunque mentalmente muchas veces viajo
por él y me desplazo de un lado a otro
como lo suelo hacer por
mi casa.
Solo observo el
comportamiento de casi todas es@s que me rodean, los analizo y saco
mis conclusiones, buenas o malas.
Una veces acertaré y
otras o la gran mayoría me equivocaré.
Pero...¿A quien le
importa?
Desde mi séptimo cielo,
hasta otro día cualquiera
Managuper.
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